Solemos relajarnos con la higiene bucal con la llegada del verano y de las vacaciones. Los días son más largos y pasamos más tiempo fuera de casa, por lo que comemos con más frecuencia en bares y restaurantes. Además, cuando llegan las vacaciones nos relajamos en horarios y rutinas. Por todo ello solemos descuidar nuestra salud bucal, pero es importante que sigamos ocupándonos de ella, ya que los gérmenes y bacterias continúan trabajando.
Uno de los principales riesgos de no lavarnos los dientes regularmente cuando estamos fuera de casa son las caries, ya que las bacterias de la boca producen unos ácidos que atacan a nuestros dientes. Además, descuidar nuestra higiene bucal también puede afectar a las encías, ya que la placa comienza a acumularse en la base de los dientes y puede formar sarro.
¿Cómo cuidar nuestros dientes cuando nos encontramos fuera de casa?
Te ofrecemos seis recomendaciones para cuidar la salud dental de tus dientes este verano:
- No olvides tu rutina de higiene bucodental: No por el hecho de estar de vacaciones debemos descuidar nuestra higiene bucal. Intenta cepillar los dientes al menos dos veces al día, por la mañana y por la noche. Si te encuentras fuera de casa y no puedes realizar el cepillado de dientes después de la comida, mastica un chicle para refrescar la boca y eliminar restos de comida.
- Hidrátate y bebe agua regularmente: El calor y las actividades al aire libre favorecen la deshidratación. Evita el consumo de refrescos y zumos azucarados, así como los aperitivos industriales, ya que favorecen la caries y la erosión del esmalte.
- Ten precaución con las actividades que realices al aire libre: Este tipo de actividades pueden conllevar un peligro para nuestros dientes y es probable que aumenten de forma significativa los traumatismo en ellos. En el caso de los deportes extremos es aconsejable proteger tu dentadura con un protector dental.
- Reduce el consumo de helados y bebidas excesivamente frías: Las altas temperaturas en contraste con el frío de los helados, de los granizados, etc., favorece la «sensibilidad dental», esa sensación de frío y malestar de los dientes es un aviso de nuestra boca del malestar de nuestra boca por estos contrastes de temperatura.
- Cuidado con la piscina y el cloro: Las piscinas favorecen la acumulación de sarro pudiendo provocar también, la aparición de manchas en los dientes y dañar nuestras encías.
- Controla la ingesta de alcohol y consumo de tabaco: Ambos nos vuelven más vulnerables y pueden hacer que aparezcan enfermedades bucodentales, además de halitosis o manchas en los dientes.
Siguiendo estos consejos podrás disfrutar del verano y de tus vacaciones fuera de casa sin poner en riesgo la salud de tu sonrisa.