La formación de los dientes comienza antes del nacimiento del bebé, desde la 5ª-6ª semana de embarazo. Primero se forman los dientes temporales o «de leche» y poco antes del parto comienzan a desarrollarse los dientes definitivos.  Cumplen la importante función de cortar, triturar y masticar los alimentos para facilitar una buena digestión en el estomago  y también tienen una importante misión en el habla.

Higiene dental infantil en Clinica Samprodent

La dentadura infantil

La dentición temporal o dientes de leche , son 20 y están dispuestos en las dos arcadas, superior e inferior. Entre todos, se distinguen ocho incisivos, cuatro caninos y ocho molares. A medida que el niño va creciendo, generalmente alrededor de los 6 años, se van cayendo estos dientes y empiezan a aparecer los dientes definitivos.

La dentición permanente  está formada por 32 dientes entre los que hay 8 incisivos, 4 caninos, 8 premolares y 12 molares, entre los que se encuentran los denominados cordales o muelas del juicio. Los primeros molares y los incisivos centrales y laterales salen entre los 6 y los 8 años; los caninos permanentes, premolares y segundos molares permanentes entre los 9 y los 12 años. La muelas del juicio aparecen normalmente después de la infancia.

La mayoría de los niños tiene todos los dientes de leche antes de cumplir 3 años y, aproximadamente, alrededor de los 14 años a la mayoría de niños se les han caído todos los dientes de leche y tienen casi todos los dientes permanentes. Aproximadamente a los 20 años, crecen cuatro muelas más, completando la dentadura con un total de 32 piezas.

Cuidados básicos de los dientes de los niños

Desde la infancia es importante contar con una buena salud dental. A pesar de que los dientes de leche tienen una corta vida en nuestra dentadura es imprescindible una buena higiene dental y cepillado dental. Muchos niños desarrollan caries en los dientes de leche y en muchos casos los dientes permanentes heredarán la misma enfermedad. Cepillar los dientes con pasta dentífrica con flúor y lavarlos al menos dos veces al día, especialmente por la noche es una tarea que debemos inculcar a los niños. Visitar al dentista una vez al año para una limpieza bucal y un examen de caries. Los tratamientos con flúor en la clínica y el sellado de los molares ayudan a proteger los dientes de la caries.